Un nuevo robo en un nuevo ridículo txuri urdin
Partido ante el Getafe, el segundo peor equipo de la liga tras el confinamiento, y la Real se presentaba en el Coliseum con una alineación y planteamiento sorprendente, 3 centrales y dos carrileros.
El conjunto txuri urdin no lograba proponer, pero tampoco sufría porque el Getafe apenas podía pasar del centro del campo. Pero Alex Remiro, emulando a Ter Stegen, falla en la salida de balón, regala el esférico a Hugo Duro, el atacante pisa a Le Normand y el árbitro y los ineptos del VAR señalan penalti. Inexplicable que no haya corregido esa acción el árbitro del VAR.
Otra polémica jugada que acaba decantándose en contra de los intereses de la Real, y ya van…Increíble que desde el club nadie salga públicamente y levante la voz ante semejante tomadura de pelo. Pitan lo que quieren y les da exactamente igual. Una vergüenza.
La Real a raíz del gol mejoró algo. Januzaj volvió a ser el que tiraba del carro y encontró premio tras una buena asociación entre Portu, Oyarzabal y el belga. Janu con la zurda empató y daba esperanzas a la Real. Poco tardó Imanol en cortar las alas a su equipo al sacar del terreno de juego al belga, bajo ningún concepto puedes quitar al que está siendo el mejor.
En los minutos finales el Getafe marcó el definitivo 2-1 tras un cúmulo de errores. Primer Zubeldia no manda el balón lejos con un patadón, permite que saquen rápido los locales y Jaime Mata gana la carrera a Aritz, que está a nivel de Segunda B, para batir por el palo del portero y con caño a Remiro, que ha completado su peor partido como txuri urdin.
Un punto de quince posibles y la sensación de que no vamos a ganar un partido de aquí al final de liga. Han cogido la temporada más ilusionante en años y en apenas dos semanas han mandado al traste todas las ilusiones de una afición que empieza a cansarse de mensajes positivos y que no ve ningún atisbo de reacción. Encima que no jugamos a nada tenemos que aguantar que desde la directiva se prefiera mantener silencio a levantar la voz por los arbitrajes.
Una vergüenza, se mire por donde se mire.